Entrevista en TVE
Seguimos adelante con la promoción de ToiletPlanet. Esta vez a la tele pública, la de todos, la de los documentales de ballenas.
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Copyright © Siqui Sánchez 2021.
Seguimos adelante con la promoción de ToiletPlanet. Esta vez a la tele pública, la de todos, la de los documentales de ballenas.
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Ayer inauguramos la exposición, con asistencia de las autoridades competentes y gran éxito de público y crítica. Internet es fenomenal y fantástico, sin duda, pero el gustazo que da pasar un par de horas charlando con unos y otros, reencontrar a gente que tenías perdida, y discutir luego la jugada tomando una cerveza, eso no tiene precio.
Hoy vamos a comentar algunas particularidades de los carteles toileteros. Carteles que, en su afán de simplificar necesitan hacer más evidentes algunos detalles por aquello de la semiótica.
Este entrañable cartel podría formar parte de un curso de adiestramiento para varones asilvestrados. Hay opiniones y debates encendidos sobre cuál es la postura más adecuada a la hora de usar la taza del váter, y no vamos a entrar en esa polémica. Yo lo que le veo es un tamaño un pelin desproporcionado al asunto (habrá quien opine lo contrario, claro está) pero es por cuestiones de lectura visual. Un cipotón semiótico, para entendernos. Veamos otros ejemplos
Si no quieres caldo, dos tazas. Aquí ya entramos de lleno en la ciencia ficción. Obsérvese la distancia exagerada a la que debe situarse el sujeto, distancia que requiere de una cierta puntería que no se obtiene si no es con mucha práctica. El extraño goteo, unido al nivel de tumefacción del miembro, podrían ser interpretados de manera un tanto equívoca. Hay mucha mente sucia por ahí. Suspenso en semiótica. Vayamos a otro ejemplo.
Más corto, pero más robusto, y además cuadrado. Made in Germany. Quedan claras dos cosas. Una, que los alemanes se curan en salud y reparten para todos lados por aquello de la igualdad de géneros. Dos, que los referentes del autor son Nacho Vidal y Pamela Anderson. Lo de poner una H y una D parece de todo punto superfluo, pero hay gente muy lerda por ahí y más vale evitar equívocos. Mis escasas nociones de alemán sólo me permite entender el precio de la micción: 50 céntimos. Una bagatela
Así de fascinante es el mundo en el #toiletplanet
Dentro de cuatro días estará a punto la maqueta final del libro, o sea que los váteres de Marruecos van a ser los últimos en entrar. Me gustan especialmente los váteres del desierto, aunque en la medina de Fes encontré unos lavabos públicos en plan Mil y Una Noches que tampoco están nada mal. Si los planes se cumplen según lo previsto, en Enero empezaremos a pegar el coñazo con la campaña del libro. De momento, vamos a seguir disfrutando del viaje.
Foto: Roser Vilallonga
Hoy sale publicada la entrevista que me hizo Victor Amela para La Vanguardia. A los dos nos gusta hablar, o sea que la cosa se alargó bastante y tuve tiempo de sobras para soltar todas las incoherencias que me vino en gana y hablar largo y tendido del proyecto del ToiletPlanet
Que luego alguien sea capaz de condensar eso en un artículo comprensible de unas pocas líneas no deja de causarme asombro y admiración. Que ustedes la disfruten.
Se acerca la navidad, esa época en que la gente se regala cosas y los centros comerciales ponen espumillón y villancicos por la megafonía. Si no sabes qué regalar a tu pareja, puedes sorprenderla regalándole un váter. Un regalo con verdadero espíritu navideño. Una sorpresa que le proporcionará incontables momentos de placer durante mucho tiempo. Los japoneses lo saben y exhiben con mimo el producto. Nos llevan años de ventaja.