Se acabó la feria
Como cada año por estas fechas me ha tocado cubrir el Mobile World Congress para Light Reading. El señor de la foto es Hans Vestberg, mandamás de Ericsson y su conferencia marca habitualmente el inicio del show. La única pega? Que estos señores son suecos y, haciendo gala de la más estricta ética protestante del trabajo convocan el asunto el lunes a las 8.30 de la mañana. Nuestro muy anglosajón cliente encuentra este horario muy adecuado, y convoca reunión a las 8 en punto para discutir la estrategia del día. O sea, que si sumamos que hay que atravesar toda la ciudad para llegar a tiempo (sobre todo puntualidad!) el resultado es un madrugón muy poco inspirador. Nadie les ha hablado de la diversidad cultural, al parecer. En España la semana empieza el lunes por imperativo legal, pero esos horarios sublevan vivamente nuestra más celtibérica idiosincrasia. Aquí no se te ocurra convocar una reunión el lunes a las ocho de la mañana si no quieres reunirte solo. Para acabar de arreglar la cosa, el ayuntamiento decide que este año no pueden aparcar motos en la plaza, tampoco ofrecen alternativas o información, de modo que a buscarse la vida. Menos mal, al menos que se note que estamos en Españistán.
Lo de la Feria no es asunto baladí. Entregar entre 150 y 200 fotos cada día, retocadas y a punto para publicar implica que al final de la jornada el número de horas trabajadas supera los dos dígitos. Luego viene siempre el que te pregunta si te consideras un artista. Depende. Aparcando la moto, desde luego. Lo otro va a días.