
Disparar con una cámara panorámica de 6×12 es un gustazo del que nadie debería privarse. Como no me apetecía gastarme dos salarios mínimos en una Cambo Wide de segunda mano, decidí una aproximación lateral al asunto: fabricar una cámara que funcione igual de bien por poco más de 300 euros, o menos si te apetece meterse en las subastas de ebay.
Lo primero fue comprar una cámara mierder: la Holga-120Pan

Lo único bueno del trasto este es que nos proporciona una caja y un arrastre para la película por poco dinero. La óptica es un pedazo de plástico infame que sólo resulta aceptable para hipsters radicales sin criterio. El engendro fue un fracaso y ya no se fabrica (gracias a Newton) por lo que encontrar una fue francamente complicado. Al final, resultó que lo tenía al lado de casa, cosas que pasan, y conseguí una en Casanova Foto por 95 euracos. Caro para lo que es, pero nos ahorramos poner en marcha la impresora 3D.
Lo siguiente, hacerse con un objetivo decente para sustituir el susodicho plástico: un Schneider Angulon 90 mm.

Más adelante hablaremos con calma del Angulon. Baste decir de momento que es una lente fabricada en los años 50 que se puede encontrar por 200 euros más o menos, dependiendo de las ganas con que busques.
Ahora empieza la matanza. Quitamos la lente de la Holga y la tiramos a la basura. Acto seguido, rebajamos con un cuchillo o una sierra el reborde en el frontal para que todo se adapte sin problemas

Una vez todo liso, tenemos que fijar una rosca que nos permita trabajar. Para eso metemos un adaptador Nikon (o lo que sea) a rosca M42. Hacemos un agujero lo más ajustado posible y lo fijamos por detrás con soldadura en fríio. No es elegante, pero es sencillo y eficaz, y por dentro tu cámara no la va a ver nadie. Recuerda pintarlo todo de negro con espray de los chinos.

A partir de aquí todo fácil. sólo hay que roscar un helicoidal que nos permitirá ajustar el foco y un adaptador de M42 a 32,5 mm. para fijar ahí el Angulon

Resumiendo el proceso, sería así:

En el capítulo accesorios, lo que cada cual quiera para customizar el invento. Yo encontré un telémetro por poco dinero que se adapta perfectamente y te permite enfocar de manera cómoda. Más que nada que le da un aspecto supercool al asunto.

Otra cosa interesante es un nivel de burbuja. Cuatro gotas de Loctite y andando

Aquí vemos el invento acabado. en próximas entregas veremos cómo solucionamos el problema del foco y demás letra pequeña, que la hay.
Y mucha.
